jueves, 11 de abril de 2013

La fivet y la dignidad de la procreación

Ha fallecido el aplaudido y nobeleado doctor Robert Edwards a los 87 años. El matrimonio Brown acudió a él para remediar su infertilidad a causa de una obstrucción tubárica que impedía que el espermatozoide alcanzara al óvulo en la trompa de Falopio y se diera así una fecundación y posterior embarazo. Acudieron al Dr. Edwards,  siendo el primero en el mundo en realizar una fecundación in vitro, extracorpórea, con éxito. La niña nació en 1978 y se llamó Louise. La fecundación in vitro ha sido muy aplaudida e incluso premiada, pues por éstas técnicas han nacido cuatro millones de niños en el mundo. Ante este éxito, hay que ser razonable y no ocultar las cuestiones éticas de esta intervención técnica en el inicio de la vida,  que no desaparecen por el nacimiento de un bebé,  siempre están presentes. ¿Justifica la infertilidad la producción y manipulación de embriones en el laboratorio? ¿Es lícito poner precio a técnicas que producen hombres?